jueves, 5 de febrero de 2009

Intentar


Romper con el encanto de la primera vez; que las segundas y no tan segundas se sucedan como la primera. Encontrarse en el mundo de la no experiencia de esa vivencia ya vivida. Nervios, ansiedad, algo nuevo/viejo que contar. Mirar y esquivar, esquivar y volver a hallarse. Miedos, aquellos que existieron siempre y que se esconden bajo la mascara de la alineación social. Un cursor que titila en la pantalla, uñas mordidas, olor a cigarrillo, preparación para la espera interminable, una espera que no es nueva, una espera que ya no espera mas y decide dejarse llevar.

2 comentarios:

Nanu dijo...

que locura!! pase a leerte y me enocontr{e con al misma foto de mi último post y esa misma espera, como si las palbras se complementaran , se intuyeran

muy bueno!!

saludos

ArteDelTodo dijo...

Me gustó.
Cuanto de la alineación nos provoca alienación?

Y la prepetición, la experiencia, ademas de aburrirnos un poco, nos hace quizás, un poco tontos. Nos volvemos resolutores como máquinas, decidiendo, actuando como el reflejo de una decisión, un acto anterior. Y dejamos, entonces, de pensar.

un saludo grande